Reseña: En el lejero de Evelio Rosero

EN EL LEJERO

Hace poco que han abierto un Re-read en Granada (eso significa que, a partir de ahora, podré tener libros muy baratitos a mi disposición). Allá que me dirigí y... ¡menuda primera compra! En el lejero de Evelio Rosero me he agenciado y me ha tenido en vilo desde la primera página. 

Rosero crea un ambiente agobiante y terrorífico, un ambiente que es tan importante como los escasos personajes que aparecen, para situar la acción en un pueblo medio fantasma, donde existen más ratones muertos que habitantes. Aquí llega el protagonista, Jeremías Andrade, en busca de su nieta Rosaura. 

Es inevitable que esta minuciosa y amplia descripción del espacio nos traiga a la mente a Rulfo. Parece que Rosero hereda de él la reunión de los personajes en un pueblo de estas características: uno empieza la novela sin saber muy bien si el protagonista está en un sitio real o en el mismísimo infierno. 

Al igual que Juan Preciado llega a Comala para encontrar a su padre, Pedro Páramo; Andrade llega a este sitio intentando rescatar a su nieta, que desapareció un día en el que la mandó a comprar rosas y nunca más regresó a la casa.

Se trata de una novela con diálogo, pero sin respuestas, por tanto el lector debe apoyarse en los ojos de Jeremías para entender qué ocurre. La acción es sencilla: Andrade llega al pueblo, se hospeda en un hotel terrorífico cuya dueña da más miedo todavía, conoce a Bonifacio y deambula en búsqueda de Rosaura hasta que, por fin, llega al lejero. Pero la verdadera trama es una metáfora bien cuidada sobre la problemática colombiana de los secuestros y la precariedad con que viven las ciudades después de una guerra.

¿Y qué es el lejero? El lugar para los que están lejos, un limbo, una sala de espera para aquellos que han sido secuestrados y que esperan su rescate, un rescate impagable la mayoría de las veces.

"-Aquí, donde usted y yo pisamos, es el guardadero. El perdedero es esa puerta la final, señor, es el mismo lejero, si quiere, esa puerta abierta para siempre, haga el tiempo que haga, una puerta al abismo, usted vaya y asómese y verá."

Fascintante. no tengo otra palabra. Si, como yo, nunca os cansáis de leer literatura hispanoamericana con puntos de realismo mágico, esta es vuestra novela. ¡No dudéis en echarle el guante!