EL MAR QUE NOS TRAJO
Libro: El mar que nos trajo
Autora: Griselda Gambaro
Lo leo en la edición de: Belacqva 2006
Puntuación: 💓
Me quedo con la cita: “Había borrado el beso con las manos, pero el beso estaba ahí (…) supo con certeza que sería el único beso que recordaría en su vida, que ése sería el único, indestructible recuerdo del amor. Después no tendría nada.”
SINOPSIS
¿Dónde comienza una familia? ¿Acaso hay un deseo fundante o el destino pega coletazos como una ballena desparramando dolor y dicha por partes desiguales? En esta emotiva historia de encuentros y pérdidas, Griselda Gambaro se zambulle en el mar para extraer los orígenes y crear lazos de amor signados por la separación. Así como los barcos deben merecer el mar para convertirse en sus mejores intenciones, los hombres han de merecer el amor que sus mujeres lanzan como redes esperanzadas. Los vínculos familiares deben también sobreponerse al oleaje político de la época. El fervor anarquista, la penuria social, los paros de frigoríficos, la muerte injusta. Novela de inmigrantes, de amor y lucha, de voces y viajes, El mar que nos trajo conmueve, sin pretenderlo, por la belleza y profundidad de un relato sobrecogedor.
¿QUÉ ME HA PARECIDO?
Leí la sinopsis del libro y me picó la curiosidad. Pese a que la historia es interesante –narra, de forma extraordinaria, encuentros fortuitos entre inmigrantes- , el final me dejó indiferente. En realidad, creo que de una historia de inmigración se puede sacar mucho más jugo y que Gambaro se queda en la superficie.
Agostino, el marido de Adele, embarca hacia Buenos Aires. Allí, su vida dará una vuelta de campana y se enamorará de Luisa, con la que tendrá a su hija Natalia. Los hermanos de Adele van a buscarlo y Agostino se ve obligado a volver con su antigua familia y tendrá otro hijo, Giovanni. Este último será el encargado de reunir los diferentes pedazos, después de la muerte de su padre.
Como veis, muy interesante. Pero sólo se nos cuenta eso, la vida de la familia (y ni de lejos es una historia familiar como la de Cien años de soledad). La autora intenta acercarse a la situación social del inmigrante, al anarquismo, a la precariedad, a la pobreza, a la injusticia, pero el lector tiene la impresión de que sólo se queda en lo básico. Asimismo, los diferentes puntos de vista de los inmigrantes -que intentan adaptarse a su nueva patria- quedan diluidos en la historia, cuando serían un punto clave sobre el cual trabajar, al menos para mí.
LA NOVELA EMPIEZA MUY BIEN
El lenguaje que utiliza Gambaro está muy cuidado e irradia ternura. La historia de Agostino, casado en Italia, que encuentra en Argentina un nuevo amor, es desgarradora; sobre todo, cuando ha de volver al lado de su mujer italiana y reivindica la existencia de su hija, el verdadero amor de su vida, mediante una foto de carnet que deja en un lugar clave de la casa. Pero… todo se desinfla.
Natalia, la hija de Agostino, tiene una vida monótona: cuida a su madre enferma de tuberculosis y a su hermana pequeña, coge valentía para expulsar a su padrastro de casa, cose para mantener a la familia, se casa con un hombre que le es indiferente… pero, realmente, no pasa nada y eso que es un personaje protagonista. No sé cómo explicároslo, es que no se le saca jugo a ningún tema.
Se nos habla también de un par de anarquistas que llegan a coger bastante importancia en la obra, pero tampoco se explota el tema. Me parecería genial que se explicara cómo estos dos inmigrantes, hartos de su precaria situación, deciden apostar por el anarquismo, cuando está claro que es una opción política muy peculiar en el lugar y la época en que se encuentran.
Tampoco se desgranan los sentimientos de estas personas. Llega un punto en el que la persona que emigra llega a sentirse extranjera en su patria y en el país en el que vive y esto suele crear una serie de conflictos internos que acaban reflejándose en su situación social, pero Gambaro tampoco lo utiliza. En la obra, muchos de los personajes echan de menos su patria, no obstante, eso sólo lo vislumbramos.
HE DE DECIR QUE:
Me quedo a medias. Cuando uno acaba la obra se plantea qué ha pasado realmente, porque se nos cuenta la vida de una familia inmigrante, pero no se ahonda en temas más jugosos. Al final, parece que sólo es un continuum de días que pasan para los personajes y, aunque la obra tiene puntos interesantes, me quedo con la sensación de que ha dejado muy poco poso en mí.
Y VOSOTROS...
¿Habéis leído a Gambaro? A mí me gustaría leerla como dramaturga.
¿Os gustan las historias de inmigrantes?
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